Por: La Redacción.
El Paso, Texas., a 7 de septiembre del 2023.- La mujer acusada de asesinato por la muerte del conductor de Uber Daniel Piedra-García, de 52 años, ocurrida en junio en El Paso, está fuera de prisión y a la espera de juicio a comienzos del próximo año.
Phoebe Copas, de 48 años, de Kentucky, estaba de visita en El Paso en el momento del tiroteo. Ella afirma que creía que Piedra-García la estaba secuestrando para llevarla a México cuando conducía la ruta asignada de Uber en la U.S. 54 cerca del Loop 375 mientras la llevaba al Speaking Rock Casino.
Inicialmente, un magistrado de la cárcel fijó la fianza de Copas en 1.5 millones de dólares. Durante una audiencia el 16 de agosto, la jueza María Salas-Mendoza, del Tribunal de Distrito 120, redujo la fianza dividida a 500 mil.
Copas pagó una fianza–por el equivalente al diez por ciento del medio millón– y fue liberado del Centro de Detención del Condado de El Paso. Actualmente está previsto un juicio con jurado para febrero de 2024.
Abogado justifica disparos
En la audiencia donde se redujo la fianza, el abogado de Copas, Matthew James Kozik, señaló que su clienta solicitó el Uber de un hotel cerca de la salida de Sunland Park de la I-10 para llevarla al Speaking Rock Casino, donde había estado la noche anterior con su novio.
Durante el viaje, Copas alega que Piedra García comenzó a conducir de manera errática y le preguntó: “¿Vas a ir a La Feria? ¿Vas a Juárez? Copas supuestamente dijo que no quería ir a Juárez y le pidió que detuviera el auto.
Kozik dijo que intentó abrir las puertas del vehículo, pero estaban bloqueadas para niños. Luego supuestamente trató de bajar las ventanas y saltar del vehículo, pero las ventanas también estaban cerradas.
Pistola de su novio
El novio de Copas, JC Knott, quien dice que había estado en El Paso trabajando en labores de construcción temporal, le dijo al juez cuando llegó a la escena que tenía que sacar a Copas del auto porque todavía estaba encerrada dentro del vehículo.
Knott también le dijo al juez que el arma utilizada para dispararle a Piedra García era suya. Copas, que tiene licencia para portar armas en Kentucky, llevaba el arma en el momento del tiroteo.
Antes de subirse a su Uber, Copas llamó a Knott para darle el número de placa del Uber al que se estaba subiendo. Ella lo llamó poco después para decirle que le había disparado al conductor de Uber y él le dijo que le enviara una foto.
“Le dije inmediatamente tan pronto como envió la foto porque no le creí porque ella es una bromista conmigo, y ella envió la foto, e inmediatamente le dije que llamara al 911”, testificó Knotts.
Aunque juez de instrucción no bajó la fianza de Copas, solo la alteró. Ahora se le pedirá que deposite al menos el 10 por ciento de una fianza en efectivo o de garantía de 500 mil dólares y el resto en forma de una fianza de reconocimiento personal de $1 millón.
Ahora la mujer está libre.
