Por: La Redacción.
El Paso, Texas., a 5 de febrero del 2024.- Hubo 69 muertes por sobredosis relacionadas con este opioide sintético en 2022, según un informe anual de la Oficina del Médico Forense del Condado de El Paso, de acuerdo con los datos más recientes disponibles. En 2021, hubo 60 muertes relacionadas con este narcótico.
La División de Campo de la Administración para el Control de Drogas (DEA) en El Paso sostiene que el fentanilo es la amenaza de drogas más mortal que Estados Unidos ha enfrentado. El narcótico, un opioide sintético que es hasta 50 veces más fuerte que la heroína, es la principal causa de muerte para los estadounidenses de entre 18 y 45 años, según la agencia.
Carlos Briano, portavoz de la División de Campo de la DEA en El Paso, dijo que los mayores productores de drogas ilícitas que contienen fentanilo son los cárteles de Sinaloa y Jalisco en México.
La División de Campo de la DEA en El Paso, que abarca el oeste de Texas y Nuevo México, decomisó 1.5 millones de píldoras de fentanilo y alrededor de 165 libras de polvo de fentanilo en 2023. Esto se compara con las 262 libras decomisadas en 2022, aproximadamente 9.8 millones de dosis potencialmente mortales, según la agencia.
Además, Briano dijo que la letalidad de las drogas aumentó. Y en laboratorios operados por la DEA en todo el país, la agencia encuentra más rastros de fentanilo en las drogas que hace un año.
Según la DEA, siete de cada 10 píldoras analizadas en 2023 contenían una dosis potencialmente letal de fentanilo, en comparación con cuatro de cada 10 píldoras en 2021. Briano señaló que dos miligramos de fentanilo, la cantidad que cabe en la punta de un lápiz, se considera letal.
“Están poniendo más fentanilo en todas las drogas ilícitas para fomentar la adicción”, comentó Briano. “Si no te mata, te dejará con un trastorno por uso de sustancias, una adicción”.
El portavoz dijo que generalmente hay dos tipos de clientes que compran píldoras adulteradas con fentanilo: aquellos adictos a drogas como la cocaína y los que buscan comprar medicamentos, como analgésicos o fármacos para la ansiedad, en la calle. A menudo, esos medicamentos son falsificados.
“Hay personas que están usando lo que creen que es sólo cocaína o heroína, pero los cárteles también están agregando fentanilo a ese suministro”, señaló.
Para evitar tomar cualquier píldora que pueda contener fentanilo, Briano dijo que las personas deben obtener una receta y comprar medicamentos en una farmacia autorizada.
“Tomar cualquier sustancia fuera de eso es peligroso”, afirmó. “Podrías estar jugando con tu vida”.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) pronosticaron cifras récord de envenenamientos por drogas para el año 2023. Su última estimación para el período de 12 meses que concluyó en junio de 2023 proyecta la pérdida de 112 mil 323 vidas estadounidenses. Casi el 70 por ciento de estos envenenamientos por drogas son atribuibles al fentanilo.
“La misión de la DEA es salvar vidas estadounidenses derrotando a los dos cárteles responsables de la gran mayoría del fentanilo que está inundando el país: el Cártel de Sinaloa y el Cártel de Jalisco. La DEA ha establecido una nueva capa estratégica de Equipos de Contramenaza para centrarse en cada cártel y las redes de finanzas ilícitas que los financian a ambos”, señala la agencia dependiente del Departamento de Justicia en un comunicado.
Jennipher Talamantes, consejera del Distrito Escolar Independiente de Ysleta, fue una de las personas víctimas del fentanilo, al perder a su hijo Jacob, de 25 años de edad, después de haber tomado pastillas Percocet falso que en realidad era una imitación hecha del opioide sintético.
La muerte de su hijo, quien decidió mudarse a un suburbio en las afueras de Dallas, Texas, al terminar su preparatoria, ha sido un dolor tan grande que no ha podido superar, pero con la ayuda de la comunidad, en especial con tres de sus mejores amigas, lo ha podido amortiguar un poco, dijo.
Visiblemente consternada manifestó que nunca pensó que se tendría “un problema tan grande de sobredosis de drogas aquí en El Paso, y ver que el nuevo narcótico en pastillas estuviera arrojando más decesos en adultos jóvenes”, indicó Talamantes.
Al igual que Jennipher, decenas de familias en la región fronteriza han experimentado una pérdida trágica debido a una sobredosis de sus seres queridos.
“Mi hijo Jacob era feliz, tenía muchos amigos, pero también quería ser alguien en este mundo… se fue al salir de Eastlake para seguir su escuela y poner su propio negocio, pero los problemas de pareja, la depresión y la falta de trabajo a causa del Covid-19, lo orillaron a ese camino”, dijo angustiada.
Manifestó que en realidad su hijo no sabía y nunca supo que lo que consumía era fentanilo y sólo sabía que era un medicamento para aliviar sus dolores musculares.
Aunque aceptó que durante su adolescencia consumía mariguana, adicción que siempre le reclamaba que no lo hiciera, su hijo era un hombre bueno y un excelente padre de dos hijas a quien adoraba.
“Como jóvenes, nunca piensan en que les puede pasar algo por eso es importante que como padres mantengamos siempre una buena comunicación con nuestros hijos”, comentó afligida.
Indicó que a pesar del crecimiento de las adicciones, hay mucha estigma en nuestra comunidad y nadie quiere contar sus historias sobre lo que han pasado con sus hijos… “Es importante que hablen, se eduquen y sobre todo estar en contacto con gente que está lista para ayudarlos”.
Expresó que con la conformación de Healing Addiction in Our Community, una organización sin fines de lucro para la educación y la concientización, se pretende tener ese contacto con las víctimas del fentanilo por lo que instó a esas familias a unirse al grupo.
